Para dedicar a una mujer especial

He dejado que mis pensamientos sean los que descubran cada uno de mis te quiero, he dejado que se oculten mis palabras a un alma que no puede decir mas que lo mucho que he pensado en ti. Por cada una de mis locuras que he cometido he dejado que mi vida sea una locura, que cuando digo que mis suspiros sean lo que mas he mencionado en mi soledad no miento. Se que eres lo mejor de mi vida, la unica razon por la que cada una de las mañanas pueda despertar con una sonrisa en mis labios. He dejado que mis palabras sean las que describan cada una de mis pensamientos, cada uno de mis momentos que se han grabado en mi vida. Se que no puedo dejar escapar a mi vida, pero para ello he de dejar que sea tu mano la que gire a mi alma. No puedo esconderme, pues en cada una de mis locuras hay un sueño que quiero hacer  realidad contigo.

Son muchas las entradas en mi diario que repiten tu nombre, muchos los te quiero que se quedaron en el tintero y que no fui capaz de decirte, muchos los poemas que han quedado huérfanos en algún rincón de mi memoria, en aquella donde guardo bajo llave aquellos pequeños minutos que tu me dedicaste. Soy como esa canción antigua que se repite día tras día, que suena en tu cabeza llevándote por un instante a los mas hermosos recuerdos. Nunca he dejado de pensar en ti, ni por un segundo creas que el tiempo o la distancia puede borrar lo que he llegado a sentir, se que es imposible, pero intenta convencer a mi cabeza que lo único que consiguió hacerme feliz no esta a mi alcance. No me rindo, porque de rendirme habré vendido mi vida a la tristeza, habré caído derrotado en esto que unos llamaron amor y del que hoy soy esclavo. Ten por certeza algo, aunque cien años pasen y un millón de kilómetros me separen de ti, yo seguiré teniéndote en el único lugar del que nadie te puede sacar, en mi co