Para dedicar a una mujer especial

 Momentos en los que pienso que la vida ya ha dejado de tener sentido, en el que se pierde la poca esperanza que quedaba. Miro a una luna que no me sonríe, que ve mis lágrimas caer sin preguntarse qué es lo que lo produce. No hay versos que se quemen en mi alma, no hay minutos que dejen de pasar en casa uno de mis recuerdos mientras pasan ante mi esos sueños que se han desvelado. Me miró a un espejo en el que no aparezco, miro a una noche que no pasa, siento como la vida ya ha dejado de lado cada uno de mis latidos y pienso en todo aquello que está perdido en todo aquello que se esconde en los minutos que nos llevan a desalojar de mis sueños la vida que merezco, los pensamientos que hacen que siga estando adelante. Pienso en lo que se ha escondido en mi alma, en cada te quiero por un simple suspiro que hace que cada una de estas palabras siga mirando a un amor que solo se ve en el reflejo de mis ojos.

Semanas que pasan, días que se suman a este calendario que se marcan en mi corazón desde la tarde en que entraste por mis ojos, recorriste mis venas y grabaste tu nombre en lo mas hondo de mi alma. Esperando ese momento en el que mis palabras puedan decirte todo esto que esta grabado a fuego en mi piel, eso que hace que me ponga nervioso cada vez que te tengo delante, que me hace soñar despierto, pensar en un futuro lejano en el que te veo a mi lado. Pero la espera es larga, largo los días y sus noches, largo el tiempo que pasa entre que te despides y un nuevo hola. Así sigo sumando días, nuevos pensamientos y un gran sentimiento que arde en mi. No hizo falta mas de unos días para darme cuenta que por muy larga que sea mi vía no habrá nadie como tú, que con mirarle a los ojos se detenga mi mundo, que sea mis sueños, desvelos y pensamientos mas profundos. Razones por las que jamas olvidarte y siempre quererte, amarte locamente, sin ser capaz de mirar a los ojos para decirte te a

Sentado en el alba de este día perfecto viendo como la luna mengua recogiéndose dejando paso a ese sol que alumbrara ni la cuarta parte que esos dos ojitos que tu tienes como dos candiles. Ángel de esta vida que encarrilas mi vida desde el amanecer hasta el anochecer, responsable de cada sueño que guía mi imaginación vela por mi, por este corazoncito que te quiso desde el primer día en que se reflejo en tu mirada buscando un motivo por el que quererte aun mas. Eres el motivo mas fuerte de mi sonreír, el motivo mas bonito por el que quererte, y la razón por la que mi locura es eterna. No eres especial, simplemente eres la única persona que enloquece mis sentidos, que enloquece mis noches, que da sentido a mi vida con una simple mirada. La locura se vuelve una razón, razón por la que quererte mas, si aun se puede. Presentar como reto conservar esa sonrisa que brilla en tu cara tanto como el faro de Cadiz en el mar.